viernes, 25 de noviembre de 2016

Si volviera a nacer...












Si volviera a nacer,
Iría a la plaza
en la soledad
de la noche,
 y el silencio de los
transeúntes.

Jugaría en las calles de tierra
descalzo  y sin polera.

Volvería al campo
los fines de año,
nadaría sin miedo
y correría bajo la lluvia.

Me arriesgaría un poco más
y le tendría miedo a la
oscuridad.

Haría ese viaje que nunca hice,
pero que siempre soñé.

Pelearía menos
y me disculparías más.

Viajaría,
sin destino conocido,
únicamente
solos los dos.

Iría a ese boliche,
el mismo día
a la misma hora
para encontrarte.

Festejaría el
día del padre
dos veces.

Un 16 de octubre,
lloraría con su
nacimiento.

Un 25 de noviembre,
bailaría toda la noche
y, me embriagaría
de felicidad.

Pelearía con la única,
finalidad del abrazo
final.

Lloraría por llorar
y reiría sin motivo.

Pelearía por leer
eso que nunca
ojeé.

Te besaría más
y te hablaría menos.

Reiríamos sin parar
nos fregaríamos
con locura.

Si volviera a nacer…
sin duda,
estaría nuevamente,
 a tu lado.

Feliz 10 º Aniversario

25-11-216



sábado, 19 de noviembre de 2016

Camino de tristeza

Caminado
en el vaivén
de la vida…
pensé en la tristeza…

Me detuve
en un beso fallido,
en una mirada esquiva,
en un sollozo pasajero….

Caminado
por la vida
pensé en la soledad…

Me detuve
en un gesto cualquiera,
en una mirada perdida,
en una lagrima infinita…

Caminando
por la vida,
la tristeza me envuelve,
la soledad me acompaña,
un llanto me consuela.
un pensamiento me hace feliz.



Juego

viernes, 11 de noviembre de 2016

Error Imperdonable

Quien no recuerda ese error del arquero en los últimos minutos que nos hicieron perder el campeonato, o ese penal fallado en la final del mundial que le dio el triunfo al equipo contrario, esa expulsión que dejo con diez jugadores, o ese cambio de táctica que hizo el entrenador que mermo las posibilidades de atacar y por consiguiente ganar.

El fútbol es energía de masas, tiene esa sensación que se siente al gritar un gol, esa sensación que se siente al abrazarse con el que está sentado en la tribuna al lado sin que sepas quien es, solo por el hecho de vestir la camiseta del mismo equipo, esa sensación que se siente al ganar un clásico o un campeonato, esas energías acumuladas dentro de un estadio, hacen olvidar de alguna manera por no decir durante noventa minutos los problemas sociales.

Las sociedades y en especial la nuestra tiene problemas, la crisis económica, la delincuencia, la inseguridad, la histeria, el stress, el caos vehicular, etc, son problemas que también tienen las grande ciudades del mundo, y el fútbol es un medio para canalizarlos, para descargarnos, para desenchufarnos. El fútbol es un remedio social.

Ahora bien, en este deporte existentes varios protagonistas, los principales son los futbolistas, en ellos recae todo el espectáculo, pueden pasar de héroes a villanos en unos segundos, están los entrenadores, que guían y dirigen a los jugadores, los periodistas que informan y los dirigentes que manejan las finanzas de un club de fútbol.

Cuando uno de esos componentes no funciona adecuadamente, existe una disfunción, cuando un jugador no se prepara adecuadamente no rinde bien, cuando un director técnico no entrena bien el equipo no funciona, cuando los dirigentes no planifican, ni administran existen problemas graves.

Convengamos que  nuestro fútbol anda mal, no quiero entrar en detalle de los resultados en la últimas competiciones, solo me voy a referir a un hecho en particular, la mala habilitación de un jugador de la selección,  que como resultado nos han quitado cuatro puntos ganados futbolísticamente, este error es imperdonable, es una vergüenza para el futbol nacional e internacional.


El futbolistas y los entrenadores están expuestos a errores y equivocaciones, por lo que conlleva el deporte como un juego, se puede ganar, perder y empatar, algunos errores son recordados para siempre, pero que un dirigente se equivoque es casi imposible, esta equivocación, este error equivale a fallar un penal en la final en el último minuto, esos dirigentes serian abucheados por cincuenta mil personas, ahora son abucheados por diez millones de personas. Es necesario un cambio urgente, caso contrario este deporte seguirá en decadencia. El fútbol en vez de ser un remedio social se convertirá en un veneno social.

http://eju.tv/2016/11/error-imperdonable/