Soy Politólogo de nacimiento, soy
así porque me parezco mucho a ellos, a esos personajes, novelescos,
pintorescos, del cual todo el mundo ama y odia, del cual todo el mundo se queja, esos que son elegidos por el pueblo, de esos
personajes que aparecen en todos lados.
Soy igual a ellos, estoy en todos
lados, aparezco cuando nadie me llama y me escondo cuando me buscan, en las
noches mis ojos brillan como si fuera un león enrabiado, doy esa impresión, a
muchos engaño, pero cuando me ven, saben que soy inofensivo, no crean que soy
mentiroso, la naturaleza mi hizo así, tengo un parecido a ellos, a mis
coterráneos, los Políticos.
Soy solitario, pero en verdad,
tengo mucha personas a mi lado, muchos que me rodean, muchos me acompañan,
quieren saber mi opinión, que pienso, que siento, muchos me adulan, pero en realidad estoy solo, nací solo, solo
como el pensamiento, solo como el mismo sentimiento, solo como la muerte.
Y, es que la política, me
apasiona, me encanta analizarla, estudiarla, entenderla, pero a la vez, la
política me entristece, me deprime, me acongoja, me vuelve sólo, me ensimisma,
me aprisiona, me encierra en mis pensamientos, me encierra en mi Yo, me
enloquece.
Como verán soy un ave triste,
amargada, melancólica, meditabunda, fría, frívola, superficial, trivial,
inteligente, perspicaz, sutil, intuitiva, chismosa, criticona, noooo, espera,
espera, espera, todo eso es mentira, soy todo lo contrario, soy un verdadero político. Soy el Cuyabo.
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